1. Filtro de Arena: El proceso de producción de agua purificada comienza con la obtención de agua de la red. Esta agua se somete primero a un filtro de arena, cuya función es eliminar cualquier elemento macroscópico presente en el agua.

2. Ablandador o Descalcificador: A continuación, el agua pasa por un ablandador o descalcificador. Este dispositivo elimina el calcio y el magnesio, que son responsables de la formación de sales minerales y depósitos de carbonato de calcio, comúnmente conocidos como sarro. El resultado es la transformación del agua dura en agua blanda.

3. Filtro de Carbón: Para mejorar la calidad del agua, se utiliza un filtro de carbón. Su función principal es la eliminación del cloro contenido en el agua potable, lo que resulta en un agua más saludable sin ningún olor ni sabor añadido.

4. Microfiltro de 5 Micras: Después del filtro de carbón, se incorpora un microfiltro con una capacidad de filtrado de 5 micras. Su objetivo es eliminar cualquier posible partícula presente en el agua, garantizando una mayor pureza.

5. Equipo de Osmosis Inversa: El siguiente paso implica un equipo de osmosis inversa, compuesto por membranas de poliamida. Estas membranas permiten la inversión del flujo del agua mediante la aplicación de presión hidráulica. Tienen la capacidad de retener hasta un 99% de iones y entre un 95% y un 99% de elementos orgánicos, contribuyendo a la purificación del agua.

6. Luz Ultravioleta: Una lámpara de luz ultravioleta es utilizada para eliminar las bacterias presentes en el agua. Esta lámpara emite radiación de onda corta de UV, que tiene propiedades desinfectantes.

7. Filtro de Sedimento: Finalmente, el agua pasa por un filtro de sedimento, que tiene la capacidad de retener partículas que varían en tamaño de 10 a 100 micrones. Su función es atrapar las endotoxinas producidas por la muerte de bacterias cuando el agua pasa por la luz ultravioleta.

Al concluir este proceso, se obtiene como resultado agua purificada de la más alta calidad, ideal para la producción de hielo u otros usos que requieran agua de gran pureza.